Preciosa canción incluida
en su álbum "A New Day Has Come" de 2002, claramente dedicada a su
hijo René Charles, fue el primer disco que grabó después de ser madre por
primera vez, esta canción refleja perfectamente los sentimientos tras la
maternidad. Con una letra muy emotiva y maravillosa, cualquier madre o padre
podría identificarse con ella. Vídeo creado con imágenes de Céline con sus tres
hijos, René Charles y los mellizos Nelson y Eddy. Disfrutadlo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario